Madrid, 28 de septiembre de
2011.- El Certamen Nacional de Fotografía Científica, Fotciencia9, ha decidido
incluir en su novena edición la participación de alumnos de secundaria y de
formación profesional. El nuevo apartado del concurso se llama “La ciencia en
el aula”, una propuesta de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC)
para fomentar las vocaciones científicas de los más jóvenes.
La forma de participar es
sencilla: el profesor tendrá que formar grupos de hasta cuatro alumnos como
máximo que deberán fotografiar aquello que tenga relación con la ciencia, ya
sea de forma experimental o aplicada en los avances científicos. Se podrán
presentar hasta tres propuestas fotográficas por colegio junto con un texto
explicativo cada una, y deberán estar relacionadas con el tema “la ciencia y la
tecnología”. El centro escolar ganador recibirá un premio de 400 euros en
material escolar.
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| Premio Micro Fotciencia8. FOTO: Marc Gasser i Rubinat |
El Certamen Nacional de
Fotografía Científica se ha celebrado durante nueve años y con una gran acogida
entre el colectivo de jóvenes científicos. Adriana Mendoza de 26 años de edad y
participante de la séptima edición comentó que “como los premios oscilan entre
los 600 y los 2200 euros es fácil motivarse. Además es agradable ver que la
administración valora el esfuerzo
y la creatividad de los científicos noveles”. Según Gil, licenciada en Química,
el acercamiento de la ciencia a las aulas de manera real incentiva e incrementa
la curiosidad de los estudiantes,
“me hubiera gustado participar en el concurso cuando estudiaba en el
instituto”, expuso la joven.
Por el contrario, Emilio Torres,
profesor de Biología del Instituto Isabel de España de Madrid calificó la
propuesta del concurso de “incompleta”, ya que, según explicó otorgar un premio
basado en material escolar no motiva al alumnado ya que no ven recompensado su
esfuerzo de manera individual. Según el docente “intentar que los alumnos se ilusionen
con una asignatura como la Biología supone un reto que la mayoría de las veces
tienen que vencer los profesores solos”. “El mundo de la ciencia se debe
inculcar desde la infancia y eso es algo que la administración a veces olvida”,
explicó Torres.
El alumno de secundaria del IES Cervantes de Madrid, Julian Aguirre, participó en el concurso junto con un grupo de compañeros de su clase y aunque no obtuvieron ningún premio pasaron unos días " muy entretenidos" elaborando las fotografías científicas y aprendiendo. "Estoy seguro que este tipo de concursos nos ayudan a comprender mejor la ciencia, en muchos casos los libros de texto son aburridos y no prestamos atención ninguna", explicó el joven.
El alumno de secundaria del IES Cervantes de Madrid, Julian Aguirre, participó en el concurso junto con un grupo de compañeros de su clase y aunque no obtuvieron ningún premio pasaron unos días " muy entretenidos" elaborando las fotografías científicas y aprendiendo. "Estoy seguro que este tipo de concursos nos ayudan a comprender mejor la ciencia, en muchos casos los libros de texto son aburridos y no prestamos atención ninguna", explicó el joven.
La nueva propuesta del concurso
“La ciencia en el aula” se expuso el 23 de septiembre en la conferencia-taller
“La magia de las proteínas”, uno de los eventos de la Noche de los Investigadores. Estuvo organizado por el Instituto Cervantes y la Sociedad Española de Bioquímica y Biología Molecular (SEBBM). El acto se completó con la exposición “Pinacoteca de la Ciencia” con imágenes
seleccionadas del portal Web de la SEBBM.
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