La Constitución Española en su artículo 14 dice textualmente: “los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”. Si se parte de esta base, ¿por qué la sociedad de hoy en día sigue prejuzgando a todas aquellas personas que no se sienten en concordancia con su cuerpo?
El doctor Vicent Bataller i Perrelló, Vocal de Derechos Sexuales de la Sociedad Española de Intervención en Sexología asegura que “la transexualidad masculina y la transexualidad femenina es un hecho real. La aparición de la página web www.carlaantonelli.com, administrada por la propia Carla Antonelli ha hecho que muchas personas transexuales tanto de España como de Latinoamérica se reconozcan, se conozcan y luchen en común por sus derechos y aceptación social. Actualmente al entrar en un buscador de internet y poner la palabra “Trans”, aparecen un montón de páginas y de organizaciones que están luchando por sus derechos y están mucho más organizadas, aunque a veces, da la sensación sobre todo en España, que existen peculiaridades e incluso distintas formas de entender y vivir la identidad transexual”.
Desde el campo de la psicología, la doctora Laura Gómez, asegura que la transexualidad no es una enfermedad, como muchas personas puedan creer. “La transexualidad, desde un punto de vista psicológico, es la simple disociación entre el sexo genético y el sexo psicológico o identidad de género que afecta a 1 de cada 11.900 hombres y 1 por cada 30.000 mujeres, y que se corrige con una reasignación de sexo, operación que desde hace unos años está subvencionada por el Estado y que también se puede practicar desde la medicina privada”.
El Colegio Oficial de Médicos defiende de forma activa los derechos de todas aquellas personas que se encuentren en una situación de transexualidad. “La transexualidad no debería ser tratada como una enfermedad, sino más bien como el hecho de que mente y cuerpo no están en un mismo plano. Todos tenemos derecho a ser lo que queremos y sobre todo a ser lo que somos”.
Sólo queda esperar que todas aquellas personas que se encuentren en esta situación consigan la paz y la seguridad de ser quienes quieran ser para encontrar la plena felicidad.
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