El ayuntamiento del
municipio da una subvención que no es suficiente para el mantenimiento del club
La Agrupación de Baloncesto de
Villaviciosa de Odón (ABVO) es un club de naturaleza privada ya que los
familiares de los jugadores se encargan de los gastos de la gestión y de los costes
federativos. El Ayuntamiento de Villaviciosa de Odón financia los gastos de
formación y aprendizaje, y pone a disposición de la agrupación las
instalaciones deportivas del municipio, como el pabellón Chema Martínez. Esta
temporada la subvención aportada por el ayuntamiento se ha visto recortada
debido a la situación económica que, desde hace unos años, sucumbe al país.
La ABVO sobrevive en mayor medida
gracias a las cuotas que pagan los alumnos del club por formarse y aprender de
este deporte. La agrupación está compuesta por trece equipos, en distintas
categorías, un equipo más que la pasada temporada, ya que han incorporado la
categoría de Benjamín femenino. La mayoría de los equipos son federados y se da
la oportunidad a todos los jugadores poder competir.
Los jugadores de la asociación
pagan unas cuotas anuales que son distintas en función de la categoría en la
que jueguen. Así los alumnos de la escuela de la ABVO abonan 95,70€, los
jugadores federados pagan 317,64€, estos mismos por ser familia numerosa abonan
227,86€ y por estar empadronados en el municipio 275,70€, son descuentos
rentables ya que un 90% de los alumnos residen en Villaviciosa.
No hay que olvidarse de la aportación
que hacen los socios al club. Desde que empezó la temporada el número de socios
ha aumentado, menos de lo deseado, con respecto a la temporada pasada. Se
espera que de aquí a final de año este número de socios sigua aumentando
considerablemente, ya que el plazo de inscripción sigue abierto. El coste de
cada socio es de 30€ anuales, requisito que obligatoriamente debe cumplir las
jugadoras de la categoría nacional femenina, dado que es el equipo de más alto
nivel del club y a cambio no pagan cuota anual como el resto de jugadores.
El dinero que pagan los jugadores
de la agrupación sirve para pagar las fichas a la Federación de Baloncesto de Madrid, para costear las competiciones, para el mantenimiento del club,
transporte y el material necesario para los alumnos.
La ABVO cuenta con una serie de
colaboradores como Tantatinta, Decathlon, Medina, Hipercas, Autocares Puestadel Sol, Madrid Sur TV, que les hace más fácil la situación, o bien se los regalan o se lo dejan a bajo coste.
Aunque la situación por la que
atraviesa la ABVO no es mala, siempre se podría mejorar. El director técnico
deportivo, Raúl Peromingo afirmó que “tenemos que hacer encaje de bolillos para
cuadrar todas las semanas los horarios de entrenamientos de los equipos, ya que
compartimos las canchas con los equipos de balonmano y fútbol sala. Además a
todos nos gustaría tener las pistas solo para nosotros, pero tenemos que
adaptarnos a las circunstancias, ya que es el único pabellón cubierto del
municipio”.
Los alumnos se quejan de tener
que entrenar en los campos exteriores del club, ya que solo disponen de un par
de canchas cubiertas y es imposible que todos entrenen en ellas. “Nos gustaría
poder tener más pistas cubiertas, pero ahora
no hay posibilidad de ello. Es muy complicado, sobretodo en invierno,
entrenar en las pistas exteriores, ya que en días de lluvia muchos jugadores se
quedan sin entrenar”, aseguró el director técnico.
Desde la ABVO se espera que
lleguen tiempos mejores y puedan aumentar el número de alumnos y seguir
formándolos desde la competición.
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