Madrid, 28 de septiembre de 2011.- El estadio Santiago
Bernabéu es uno de los campos de fútbol más valorados por la UEFA, con mejores
instalaciones y también uno de los que mayor aforo tiene actualmente.
La mayoría de los aficionados al fútbol, en concreto los
aficionados al Real Madrid, acuden a este estadio, situado en el distrito de
Chamartín, para ver jugar a su equipo favorito, pero son pocos los que piensan
cómo será el partido visto desde fuera del estadio. Todas las personas que
acuden a ver los partidos de fútbol llegan al estadio un rato antes de que
comience, se mantienen allí durante el partido y luego se van. Pero allí quedan
los vecinos de la zona, los empleados de la limpieza, los dueños de los bares,
los propietarios de los establecimientos, etc. Estas personas son las que
realmente saben cómo es un partido de fútbol visto desde las inmediaciones de
los estadios.
El Santiago Bernabéu, en concreto, se encuentra en un
barrio residencial, por lo que encontramos multitud de viviendas, bares, y establecimientos.
Las opiniones con respecto al ruido, la suciedad, las molestias que se causan a
esto propietarios cada vez que hay un partido de fútbol son, en algunos casos,
contrarias.
Los vecinos más jóvenes están de acuerdo en que el ruido
que provoca la gente no es ni mucho menos insoportable, ya que en realidad
cuando más jaleo se forma es durante las dos horas aproximadamente que dura el
partido, que es cuando la gente grita, silba, canta los goles, etc. Las personas
algo más mayores que llevan viviendo allí muchos años están más que
acostumbrados la mayoría a este tipo de ruidos, pero también están de acuerdo
es que se puede soportar, ya que no dura hasta altas horas de la noche. Lo que
sí es una molestia para los vecinos es el hecho de los aparcamientos, porque
estos días en los que hay partido cortan una de las calles próximas al estadio
para que puedan estacionar todos los autobuses de las distintas peñas que vienen
de toda España para ver el encuentro.
Los que están más contentos los días que hay partido en
el Bernabéu son los propietarios de los establecimientos, ya que al acumularse
tantas personas obtienen una recaudación mayor que la que logran los días que
no hay fútbol. Un buen ejemplo sería los bares de la zona a los que mucha gente
va, o bien porque en sus casas no pueden verlo, o bien porque les gusta el
ambiente, escuchar a toda la gente que está dentro del estadio viendo ese mismo
partido. Otro ejemplo serían los quioscos que están alrededor del estadio en
los que se venden camisetas, bufandas, trompetas, banderas, o en los que se
venden refrescos y frutos secos. Los dueños de estos quioscos la mayoría de los
días no abren porque venden más un día de partido que en el resto de la semana.
Como es normal en estos casos, hay excepciones, y hay
partidos en los que los aficionados del equipo contrario son más violentos o
que la rivalidad entre ambos es mayor y se forma algún escándalo, pero en este
caso no es lo normal.
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