El regreso de Julián Calero

Tras pasar tres meses por tierras europeas, Julián Calero ha regresado al AD Parla. Vuelve de Rusia para tomar las riendas del equipo nuevamente. Calero dejó el equipo en julio de 2010 y fichó por el FC Volga ruso. Tras disputar varios partidos sin que acompñaran los resultados, aceptó de nuevo el reto de dirigir al AD Parla.

Cuando llegó al conjunto negriazul en octubre de 2010, se encontraba con tan solo cinco puntos en ocho partidos y en una situación crítica. Consiguió salvar al equipo del momento difícil que atravesaba. El presidente de la entidad parleña, Eugenio Fernández Lagos, tuvo que vender varias de las estrellas del equipo a principio de temporada por motivos económicos.

Julián Calero conoce muy bien al equipo desde hace tiempo. Fue jugador del Parla seis temporadas además de ser entrenador en categorías inferiores, segundo de Michel en el Rayo cuando estaba en Segunda B y llegando a las categorías juveniles del Real Madrid. Calero demostró en su presentación que tiene muchas ganas de hacer un buen papel.

Experiencia en Rusia

Se le ofreció la renovación pero las ofertas a Julián Calero llegaban. Se despidió del equipo pactando con el presidente que no entrenaría a ningún otro equipo de tercera que no fuese el AD Parla. Finalmente el madrileño se marchó en julio de este año. Un equipo ruso llamado FC Volga de la ciudad Nizhni Nóvgorod al este del país, recién ascendido este año a la Primera División rusa, se fijó en él, un entrenador que no tenía experiencia en equipos de grandes ligas. Hace 10 años el equipo ruso se encontraba en la misma situación que está ahora mismo el AD Parla, tres categorías por debajo de la Primera División. Para esta nueva aventura eligieron a Julián.

Llegó para sustituir al antiguo técnico destituido por los malos resultados. El equipo se encontraba cuarto por abajo. Dirigió el equipo durante tres meses junto a Dimitri Tcherisev, quien fuera jugador del Sporting de Gijón, y al que conoció tras su paso por el Real Madrid. Coincidiría en el equipo con el futbolista, ex del FC Barcelona, Marc Crosas que llegó en febrero.

Julián Calero vivió en Rusia un hecho desagradable. El 7 de septiembre ocurrió un accidente de un Yak-42 que se estrelló en tierras rusas y en el que fallecieron 46 personas que integraban un equipo de hockey. Calero aseguró que utilizaban ese avión para los desplazamientos del equipo. “Si se confirma el fallo mecánico finalmente podría habernos tocado a nosotros. No lo quiero ni pensar”, afirmo Calero a medios locales.