La asociación de vecinos del barrio de
Butarque, Villaverde, denunció la pasada mañana las malas condiciones de los
campos deportivos del barrio. Consideraron pobres las promesas del ayuntamiento
con respecto a su arreglo y reestructuración, por lo que vieron necesaria la
recogida de firmas para que este hecho cambie.
Varios equipos que se enfrentaron al Butarque
han afirmado este hecho y también han solicitado no visitar las instalaciones
el próximo año dadas las condiciones.
Como fue de esperar, la falta de mantenimiento
y deberes en estos campos de fútbol, dieron fruto: el nacimiento de plagas e
insectos que no solo aparecen en los campos sino que, como argumenta un vecino
de los alrededores, también les está afectando a ellos.
En diversas ocasiones se explicó el problema,
tanto por los vecinos como por parte de otros barrios del municipio advirtiendo
del grave riesgo de higiene y de salud que conllevó la aparición de estas
plagas. Los vecinos aseguraron que la presencia de roedores y de cucarachas se hace
común en el barrio, y no creen que sea una coincidencia. Esto es debido a la
inacción del ayuntamiento en materia de salubridad y desinfección, lo cual
conlleva a un barrio más sucio y un entorno más nocivo.
Desde el verano, la plaga de insectos asola
los terrenos de juego.
Esta situación continúa, y las plagas siguen
haciendo de las suyas, con el precedente que conlleva y siendo una pesadilla
social para los vecinos.
La gran pesadilla, eso sí, es para los
jugadores, los cuales también han mostrado sus quejas. Advierten de que dejarán
de entrenar y jugar si los campos no están condicionados en un periodo
aproximado de dos meses. La directiva también se posicionó del lado de la
plantilla.
En el Ayuntamiento de Villaverde aseguraron que ya se trató
este tema y la respuesta fue que se mejoró la situación de los campos y, que además;
desconocían la existencia de plagas.
Por otra parte, no aseguraron el mejor
mantenimiento de estos, tal y como exige la asociación de vecinos de Butarque.
Aunque parezca un hecho insólito no es así. En
la Comunidad
de Madrid aparecieron a lo largo de los últimos cinco años casos similares, los
cuáles fueron denunciados.
Varios de estas denuncias triunfaron, pero
algunas como las de Butarque siguen fraguando. Aún luchan para que sus condiciones
cambien.
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