La campaña de retenes de incendios acaba en la localidad abulense de Hoyocasero

La labor del  reten contra incendios de Hoyocasero ha acabado el 30 de septiembre tras cuatro meses de labores medioambientales. El periodo finalizó coincidiendo con el fin de la temporada de alto riesgo por incendios en la zona.

La cuadrilla estaba formada por dos conductores de autobombas, uno principal y un segundo que hacía las sustituciones del primero, y tres peones, que se iban rotando para que siempre hubieran dos personas en la cuadrilla. Los trabajadores para cada campaña son seleccionados por “el propio consistorio en base a sus propios requisitos” según el teniente Alcalde de Hoyocasero, José Luis de la Fuente. 


La existencia del reten no solo beneficia, según el primer conductor de la autobomba, Mariano González, al ecosistema "protegiendo los montes de gran valor medioambiental de la zona", sino que además evita el despoblamiento que sufre la zona "facilitando puestos de trabajo", añadía el teniente de alcalde.

Autobomba Hoyocasero/ Fuente:  Mariano González 

La financiación de la brigada en primera instancia ha sido competencia de la alcaldía quien tiene que hacerse cargo de anticipar las nóminas de los miembros del reten. Tras la campaña recibe una subvención de la Diputación de Ávila con la que recupera las cantidades adelantadas, pero, según el primer conductor de la autobomba, “la subvención se ha recortado a la mitad por lo que el Ayuntamiento tiene una mayor carga económica”. 

A pesar de los recortes presentados en junio de este año por la consejería de Medio Ambiente de Ávila, en el que el presupuesto para incendios se redujo de 82 millones de 2010 a 70 millones en 2011, los miembros de la cuadrilla de Hoyocasero no han sufrido las consecuencias. 

El reten de Hoyocasero/ Fuente: Mariano González

Las actuaciones de este verano han llevado al grupo de lucha contra incendios a actuar en pueblos como Navalacruz, Navarredonda, Burgohondo y en el propio Hoyocasero. Según Mariano González la actuación más importante de estos últimos cuatro meses ha sido el fuego que se desató en Navalacruz el 18 de agosto ya que “llegó al nivel dos de alerta, por las 800 hectáreas arrasadas de monte bajo de matorral y pastos, por su duración, más de tres días añadiendo las labores de control de focos, por el número de efectivos que colaboraron en las labores de extinción, llegando a ser más de 400 y por afectar a varias localidades cercanas, La Hija de Dios, Mengamuñoz, Sotalbo y Solosancho.” 


Con el fin de la campaña la valoración, según el conductor de la autobomba, ha sido "positiva ya que en el grupo ha habido buen ambiente y compañerismo que ha dado lugar al trabajo efectivo y bien hecho". Como colofón, la cuadrilla junto a agentes medioambientales y miembros de la corporación municipal se reunieron para comer y hacer balance.