Continúa la lucha literaria entre el formato digital y el formato de papel

La puesta a la venta un mes antes de lo previsto de la única biografía autorizada de “el rey Midas de la tecnología”, Steve Jobs, hace apenas una semana, ha traído consigo el debate de si el formato digital de lectura acabará sustituyendo al formato tradicional. La biografía, que puede bajarse desde los portales Amazon o iTunes, entre otros portales de descarga literaria, no es más que el último capítulo de una lucha de formatos que se prevé que cada vez esté más igualada.

La vocal de la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), Concepción Rocal, dijo a este medio que “es indudable que cada vez va a haber más presencia de los ‘e-books’ en las bibliotecas, las librerías, y en casa de los lectores, pero nunca se podrá llegar a sustituir el formato de papel”, si bien opinó que “los que mejor sepan aprovechar las virtudes de este nuevo medio serán los que triunfen”

Estudiante leyendo en la biblioteca de Lauderlade/ Erickson, Roy

En la segunda Encuesta sobre el Libro Digital en España, realizada por la FGEE, se establece que las materias que van a tener más impacto en la digitalización (según el tanto por ciento del fondo que se comercializará en digital en 2012) son Derecho y ciencias económicas, Divulgación general, Libro científico-técnico y universitario y Literatura, llegando aproximadamente al 40%.

Pero la crisis también ha afectado al formato en auge, a igual que al formato clásico. Así lo confirmó la jefa de planta encargada de la librería de El Corte Inglés de Preciados, Sara Goicoechea. "Es lo más lógico del mundo que ahora se vendan menos libros…al igual que pasa con las películas o con los discos. Si la gente está mal de dinero lo primero que hacen es quitarse los vicios. No es lógico quitarte de comer para comprar la última novela de Vargas Llosa”, opinó Goicoechea.

En una entrevista concedida al periódico La Vanguardia la consejera delegada de la editorial Random House Mondadori, Núria Cabutí, afirmó que las editoriales que sepan adaptarse a “ofrecer al lector los contenidos de maneras distintas” serán premiados.

Además, señaló que es un fenómeno que se puede ver “en el mercado del libro infantil, donde la tecnología ofrece unas posibilidades muy amplias, te permite llegar de modo más directo al lector”.

Todo ello nos hace pensar que una buena convivencia es posible siempre que se sepa cómo aprovechar las posibilidades de los nuevos formatos y las fuerzas y claves por las que el formato tradicional sigue, de momento, siendo el preferido de los lectores.