Navidad es sinónimo de frío, de
regalos, de comilonas familiares y, sobre todo, de lotería. La larga fila de
personas que esperan para entrar en establecimientos como el de 'Doña Manolita' en la plaza del Sol de Madrid es una estampa tan propia de estas fechas como la
cabalgata de los Reyes Magos. Para unos, la compra de décimos significa 'comprarse un coche', 'tapar algún agujerillo', 'pagar la hipoteca' y, en
tiempos de crisis como el actual, nadie se quejaría si le tocan unos cuantos kilos.
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La representación de Cortilandia para esta Navidad / Foto: M.Rico |
En la otra cara de la moneda se
encuentran los vendedores de ilusión, los loteros, que hacen su agosto en esta
temporada invernal. Personas cuya profesión es repartir suerte. Pero no todas
las personas se dedican a esta tarea como forma de vida. Las hay que, sin
recibir ningún tipo de recompensa económica, venden boletos para ayudar a que
ONG o entidades sin ánimo de lucro consigan remuneración a través de estos
medios para continuar financiando su causa solidaria.
María Ariza es colaboradora de la
Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) y está orgullosa de poder ayudar a
la función social de esta organización.“Mientras Dios me dé salud voy a seguir
colaborando”, asegura, “yo colaboro con esto y siempre que me llaman estoy”. El
destino de estas donaciones es la investigación de la enfermedad y “ ayudar a
niños que tienen cáncer y, a lo mejor, son de fuera y tienen que venir a
Madrid, o tienen que ir a Barcelona, y se hacen hogares para que los padres
estén con los niños. Para mí, es una labor muy buena”.
Como ella, existen en España
alrededor de cuatro millones de voluntarios, según la Plataforma de Voluntariado en España, encargada de coordinar las actividades que realizan
organizaciones de voluntarios de todo el país. Esta semana, se ha celebrado el
día internacional del voluntario, coincidiendo este 2011 además, con el Año
Europeo del Voluntariado. Las áreas que más precisan ayuda son las que trabajan
con personas discapacitadas y con niños.
Los voluntarios son personas que
quieren actuar, que quieren trabajar sin ningún tipo de reembolso por el
desempeño de su actividad. Personas que, de manera altruista, se ponen a disposición
de la organización a la que pertenecen para colaborar con la causa. Cualquiera
que sea mayor de edad puede ser voluntario, pero no sólo hay que querer y
poder, sino que también hay que valer. En determinados momentos es necesario
tener valentía y voluntad y estar preparado para momentos duros. Están en las
mesas informativas que se preparan para días especiales como el del Cáncer o el
Día Mundial sin Tabaco. Son las personas que reparten lazos y los prenden en
las solapas, las que piden donativos con las huchas, y las que ayudan a los
enfermos y a personas que no pueden valerse por sí mismas, de forma desinteresada.
Esta Navidad, como tantas otras, estarán vendiendo lotería y regalando
sonrisas.
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