Según
la Organización de las Naciones Unidas
para la Agricultura y la Alimentación
(FAO), hay más de un millón de pescado
descartado en la pesca y a su vez estima que 925 millones de personas pasan
hambre en el mundo.
El Director de Cooperación de la FAO,
Alberto López, apunta que hay que implantar infraestructuras para mejorar los regadíos,
ya que el 70% de la pobreza se encuentra en la población rural, y además, mejorar las técnicas de producción para
promover el autoconsumo. Respecto a la situación del pescado de descarte,
afirmó López que “la solución es crear
alternativas para reducir las pérdidas y desperdicios de alimentos”.
Los países industrializados del mundo
tienen una forma de alimentarse que produce un volumen alto de desperdicios de
alimentos. Este derroche, que también existe en los países en desarrollo, ha
provocado que un grupo de armadores del sector pesquero, busque alternativas para
ello.
Según el director gerente de Espaderos del Atlántico S.A., Emilio Martínez Cadilla, “las especies vivas del océano que los pescadores de mis barcos dañan o matan, o simplemente los tiran al mar por no tener una salida comercial en los países desarrollados, vamos a transformarlas en alimento adaptado para los países del tercer mundo”. Además, aclaró que será una conserva que no necesitará ningún tipo de refrigeración y evidentemente, mantendrá todos los nutrientes que los productos pesqueros tienen de forma natural.
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| Foto muestra de Conserva/A.O |
Según el director gerente de Espaderos del Atlántico S.A., Emilio Martínez Cadilla, “las especies vivas del océano que los pescadores de mis barcos dañan o matan, o simplemente los tiran al mar por no tener una salida comercial en los países desarrollados, vamos a transformarlas en alimento adaptado para los países del tercer mundo”. Además, aclaró que será una conserva que no necesitará ningún tipo de refrigeración y evidentemente, mantendrá todos los nutrientes que los productos pesqueros tienen de forma natural.
El consejo de Ministros de Pesca de la
Unión Europea, que está debatiendo la reforma de la Política Común de Pesca, ha
aprobado la prohibición de los descartes en los barcos de pesca. Esta decisión
va a motivar que el sector pesquero tenga la obligación de buscar salida al
pescado desechado, que según la Asociación para la Defensa de la Naturaleza (WWF/
Adena ) suponen el 40 % del total del
pescado.“Es un despilfarro mostruoso de comida”, señala el responsable de
pesquerías, Raúl García.
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