Los habitantes de Móstoles y Navalcarnero no han
protestado formalmente sobre la paralización de las obras del tren que unirá
los municipios, pero a pie de calle, todo son quejas y reproches hacia la
Comunidad y la gestión en este proyecto.
Cándido Jaramillo, de 26 años y residente en Móstoles afirma que “las
promesas electorales de los alcaldes y la presidenta de la Comunidad de Madrid
nunca deben ser oídas porque respecto a la línea de renfe, nunca se han
cumplido”.
La línea ferroviaria, que prometió en la campaña electoral
de 2006 el entonces alcalde popular mostoleño, Esteban Parro, está por
finalizar y las obras han dejado la calle principal del casco urbano de
Móstoles levantada y sin rematar.
Esta propuesta nace de la idea de la Presidenta de
la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, que ansiaba prolongar la línea C5 de
Cercanías, desde Móstoles, hasta Navalcarnero. Además la petición histórica del
Ayuntamiento de Navalcarnero ejerce presión, puesto que el único método de
conexión entre los municipios del suroeste es el autobús.
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| Foto: Cartel obras línea Móstoles-Navlacarnero / Fuente: Vivireltren.es |
En el año 2006 nació la promesa y en un estudio
conjunto con el Ministerio de Fomento, por aquel entonces capitaneado por
Magdalena Álvarez, se rechazó la idea de Aguirre que pedía alargar la línea existente ya en Móstoles. Tras la negativa, la Comunidad planteó construir una línea ferroviaria independiente que
uniera los dos municipios, un trayecto para Metro Ligero o Cercanías.
El proyecto, que finalmente se haría para Cercanías, contaría con cinco estaciones entre los
municipios, tres en Móstoles situadas en Móstoles Central, Móstoles El Soto y
Parque Coimbra-Xanadú; y dos en Navalcarnero, que estarían localizadas en el
Centro y el Ensanche.
Falta
de liquidez
La construcción se encargó a la empresa OHL,
constructora en la que la presidenta Aguirre tiene intereses económicos. La
comunidad de Madrid pagaba a la empresa una cantidad de dinero por la construcción
de la línea, y desde el inicio de obra, en 2007, hasta 2010, todo fue sobre
ruedas, pero con la crisis, la construcción se paralizó y aún no se ha
retomado.
OHL reclama a la comunidad de Madrid parte del
precio de obra y la Comunidad se escuda en que no hay liquidez. La finalización prevista para finales de 2013 ahora no es segura.
Esteban
Parro, utilizó de nuevo como promesa electoral la obra del tren en las
elecciones municipales de 2011, pero hasta su cambio de puesto, y fin de cargo
en el consistorio mostoleño, la obra ha continuado paralizada.
El actual mandatario mostoleño, David Ortiz, ha pedido a Esperanza Aguirre que alcance un acuerdo con el Ministerio de Fomento para
terminar la obra y que los habitantes de Móstoles y Navalcarnero disfruten al
fin del transporte público entre municipios.
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